Tres misioneros Venezolanos llegan a Colombia para evangelizar en zonas vulnerables de Villamaría, Caldas.
mayo 15, 2025
Caldas, 5 de agosto de 2025. La Fundación Charlene continúa su compromiso con los más pequeños y necesitados a través de una hermosa labor misionera: cada viernes visita un hogar de niños que enfrentan difíciles realidades familiares, brindándoles no solo alimentos, sino también alegría, fe y acompañamiento humano.
Los niños atendidos viven en situaciones de gran vulnerabilidad, en hogares marcados por la ausencia de sus padres, conflictos familiares, pobreza extrema, y realidades tan duras como tener familiares en prisión o lidiar con el consumo de drogas. Ante estas heridas profundas, la fundación se convierte en un faro de esperanza.
Los misioneros de la Fundación Charlene, jóvenes laicos comprometidos con el Evangelio, llegan cada semana cargados de amor y generosidad. En cada visita comparten un desayuno, organizan actividades recreativas y, sobre todo, siembran fe en los corazones de los niños a través de la evangelización vivida con cercanía y sencillez.
“Más que llevar alimento, queremos compartir con ellos la certeza de que Dios los ama, que no están solos, y que su vida tiene un propósito”, comenta uno de los voluntarios.
Los directora del hogar, conmovidos por la constancia y el cariño con que se realiza esta misión, reciben cada viernes a la fundación con brazos abiertos y corazones agradecidos, valorando la presencia de quienes, semana tras semana, transforman la rutina de estos niños en un espacio de encuentro, juego, fe y dignidad.
Esta labor encarna el espíritu de la Sierva de Dios Charlene Richard, cuyo ejemplo de fe sencilla y amor desinteresado sigue inspirando acciones concretas de servicio y evangelización en los lugares donde más se necesita.
